Hilo Negro

Con Jenny somos amantes desde hace aproximadamente 4 años, pero no somos el tipo de amantes que ustedes conocen, no sr, somos de una clase distinta. Somos amantes por necesidad… es algo complicado de explicar y de entender, pero en la práctica resulta placentero.

Aunque trabajamos en la misma empresa, estamos en distinta sucursal, lo que hace que nuestro contacto físico sea limitado, yo tengo una relación estable desde hace 4 años, por el lado de Jenny es una soltera que vive feliz su vida y no es de esas mujeres que les gusta sentirse subyugada en una relación, como tampoco amarrada a cualquier hombre.

Dicho esto, les contare como fue nuestro primer polvo, siempre el primero es el más emocionante, el que está cargado con todo el morbo, en definitiva, es el polvo que nunca, ni jamás de los jamases olvidamos.

Entramos a trabajar a la empresa el mismo día, mentiría si digo que la química fue inmediata, de hecho, me parecía demasiado sobrada, en fin… el caso es que con el pasar de los días empezamos a coincidir a la hora del almuerzo y en las conversaciones teníamos amigos y sitios en común que frecuentábamos, así paso bastante tiempo sin que la química apareciera entre los dos.

Por razones económicas tuve que conseguir un segundo empleo, así que conseguir ser administrador de un bar los fines de semana, trabajaba jueves, viernes y sábado, me resultaba regio por que podía combinar los 2 empleos al tiempo que me divertía en el bar.

Un fin de semana los compañeros de la empresa armaron un combito para salir de rumba, como ya sabían dónde era mi 2 empleo quedaron en encontrarse allá, más motivados por el descuento en el trago que les iba a dar que por otra cosa. La verdad no esperaba ver a Jenny esa noche pero llego con el grupo, al entrar al bar fue hasta la barra y con una sonrisa de oreja a oreja me abrió los brazos invitándome a salir de ahí y darle un abrazo, lo que de la manera más natural hice, pero al abrazarla sentí que me apretó más de lo normal y pude sentir sus senos como se encajaban en mi pecho, me gusto lo que sentí, así que aproveche el momento y la abrase un poco más fuerte mientras besaba suavemente su mejilla, nos miramos y en ese momento algo entre los dos hizo click, no sé cómo definirlo pero en ese instante la tal química que la gente habla apareció:

-hola lindo, que rico verte. Te ves muy bien sin el uniforme de la empresa.

+tú no te quedas atrás, te ves muy mamasota, quien se iba a imaginar que detrás de ese uniforme de boy scout tuvieras todo eso.

Normalmente cuando tengo confianza con las mujeres soy bastante directo en los comentarios, y con el tiempo le digo a las cosas por su nombre, al culo, culo y a las tetas, tetas. Por eso no le sorprendido mi comentario de cómo iba vestida, y la verdad que se veía muy hembra, llevaba puesto un jean descaderado, blusa roja de tiritas que dejaba ver su brasier donde guardaba unos senos medianos bien formados, llevaba el pelo recogido en cola de caballo lo cual hacia ver muy sexy su cuello y hombros

La verdad quede gratamente sorprendido al ver el mujeron que había debajo de ese uniforme de impulsadora de ventas. El bar e lleno como de costumbre y la noche sábado tenia una atmosfera distinta, el casting de las niñas era de lujo y los hombres que llegaron al bar estaban “buenos” y no lo digo yo, lo decían las meseras que entre ellas comentaban cuando se acercaban a la barra a pedir los licores:

-viste el tipo que está en la mesa 8? Le decía la una a otra.

+uyyy siiii, esta papacito, además que huele súper rico.

Comentarios como estos fue normal escuchar esta noche de parte del staff service.

La noche continuo y me relajé un poco acercándome a la mesa de mis compañeros quienes reían a carcajadas con los cuentos de la gente de la empresa, cuando me senté me hice al lado de Jenny quien sin preguntarme me sirvió una copa de aguardiente para que brindáramos.

-por el asesor más juicioso de la empresa!

Al escuchar esto, todos gritaron haciéndonos una burla:

-ehhhhh, se las tiraron todas Andrés

-oiga Jenny deje algo

Nos reímos, brindamos y continuamos con la charla mientras Gina la más loca del grupo se subió en la mesa a bailar ya que el dj le metió reguetón a la noche, todos nos levantamos y empezamos a bailar de manera bastante liberal, sentía como Jenny recostaba sus senos contra mí con cada golpe del bajo, mientras sostenía su cabeza con las dos manos.

Las señales eran claras, estaba siendo seducido por Jenny y claramente yo disfrutaba del momento.

Cuando el perreo se empezó a sentir más intenso, escuche a mi lado a una de mis meseras:

-Andrés, te necesitan en la barra, hay un problema con una cuenta

¡No lo podía creer, porque tenía que pasar esto justo cuando Jenny perreaba en mi verga!

Bueno, trabajo es trabajo, y yo no estaba en plan de diversión esa noche.

Le dije al oído:

-discúlpame, tengo que regresar a la barra.

+no te preocupes, es tu trabajo,

Dio la vuelta y se unió nuevamente al grupo, siguió perriando con los compañeros de trabajo, mientras yo me retiraba no sin antes ver como movía su cadera.

Pasada la media noche, es usual que aprovechando el ambiente de los clientes el dj invente concursos, por esa época estaba de moda el baile de la botella. Entre el público se escogieron 4 voluntarias para que a que mejor bailara se llevara la botella de aguardiente de la noche.

Paso la primera y no lo hizo tan mal, la segunda lo hizo aun mejor, ¿pero adivinen quienes eran las otras 2 participantes? Gina y Jenny.

Mis amigos se sentían ganadores, empezó a bailar Gina que llevaba un legis blanco donde se apreciaba perfectamente su hilo de color blanco, empezó a bajar a la botella de una manera muy sensual mientras tocaba sus senos y mordía sus labios, el bar estallo en gritos, mis compañeros no podían creer, se abrazaban entre ellos, la alegría que se sentía era solo comparable con el júbilo que se siente cuando la selección Colombia hace un gol. El dj paro la música y solo se escuchaba a los hombres gritar:

-esa es, esa es, esa es!

+calma que aún falta una concursante señores, respondía el dj por el micrófono, mientras daba las gracias a la Srta. # 3

Sonó nuevamente el baile de la botella y Jenny empezó a bailar, de un momento a otro levanto lentamente la blusa roja que llevaba, insinuando querer quitársela, todos mirábamos expectantes, ¡cuando zas!!! Fuera blusa y su brasier negro resalto con su piel blanca.

Nuevamente el bar estallo en jubilo, pero esta vez los hombres le pegaban a las mesas, mis amigos nuevamente se abrazaban entre ellos, tomaban aguardiente ya no en copas sino directamente de la botella, Jenny seguía bailando tan sensual que empezó a tocarse mientras desabrochaba su jean y nos dejaba ver una diminuta tanga hilo dental color negro, que bordeaba sus nalgas… ahora si el bar se iba a caer, los hombres estaban frenéticos, las novias codeaban a los novios, otras de manera jocosa intentaban taparles los ojos, las envidiosas se hacían las desentendidas, el dj y yo nos miramos, no lo podíamos creer, nos dejamos contagiar de la alegría mientras chocábamos nuestras frentes y bridábamos con un aguardiente.

Pero lo mejor de la noche aun no ocurría, el dj paro la música, pidió calma, mientras Jenny aprovechaba para abrochar el jean y ponerse su blusita.

La decisión era empate y había que hacer un nuevo baile, la decisión la aplaudieron los hombres porque les permitía volver a ver el show de estas mujeres, pero para el desempate ya no iba a ser con el baile de la botella, la canción escogida fue Bombastic de Shaggy. Pero la condición era que bailaran al mismo tiempo para no hacer más largo el concurso, estas nenas empezaron a bailar de manera sensual cada una con su estilo, pero el ambiente empezó a subir rápidamente cuando decidieron regalarnos un baile lésbico, tocándose los senos y el resto del cuerpo al estilo de la película Coyete Uggly, is amigos ya no se abrazaban, simplemente solo bebían pico de botella mientras seguían con la mirada a estas mujeres.

El bar casi se derrumba cuando al terminar el baile con broche de oro Gina y Jenny se dieron un muy morboso beso con lengua, el dj determino que las dos eran ganadoras, decisión que todos aplaudimos.

La noche siguió con un merengue de Sergio Vargas con la respuesta de todo el mundo a bailar, me acerque a la mesa a felicitarlos y a llevar el premio, todos estaban aún histéricos por el show, Jenny me dijo que se sentía apenada pero que la adrenalina y el morb0 que sintió esa noche eran únicos. Me abrazo por la cintura mientras me mordía el brazo diciéndome que estaba aún nerviosa, lo próximo que sentí fue como su mano tomo la mía y entre cruzo los dedos, me sentí muy cómodo y disfrute de ese momento, provechando que mis amigos andaban levantándose a unas nenas de otra mesa, me robe a Jenny y empezamos a bailar, nos abrazamos mientras sentíamos la tibieza del cuerpo de cada uno, esta mujer bailaba delicioso, sentía sus senos en mi pecho y la reacción de ella fue bajar mis manos de la cadera a la mitad de sus nalgas, bailábamos bastante amacizado, casi que en una baldosa, y sentía como me apretaba con su sexo tratando de frotarlo contra mi verga que estaba seguro que ya sentía en plena erección, un beso resbalo por la mejilla mía, y otro más y otro más hasta llegar a la boca donde nuestras lenguas se entrelazaron, sentí sus labios carnosos que me apresure a morderlos, mientras ella se apoderaba de mi nuca y cabeza con sus manos.

Al terminar la canción se quedó mirándome y me dijo

-Besas delicioso! Quiero que solo tú me saques a bailar el resto de la noche.

Regrese a la barra a atender algunos asuntos e iba a sacarla a bailar cada vez que podía, así paso la noche y en cada canción se repetía la misma escena, me encantaba como me besaba, su pelo olía delicioso y la forma como me acariciaba la cara cuando nos besábamos nunca antes una mujer lo había hecho de esa manera.

Ya rayaban las 3 am y el bar empezó a quedar vacío, mis amigos se habían levantado las nenas de la mesa de al lado, Gina se despidió de todos y se iba a moteliar con su novio, empezaron a organizar la vaca para pagar la cuenta mientras planeaban el after party, pero yo no podía irme con ellos, tenía que cerrar el bar y cuadrar las cuentas. Sabía que Jenny no se iba a ir con ellos, así que le dije al oído:

-me esperas a que cierre el bar y les caemos donde estén?

Me apretó la mano, se acercó a mi oreja diciéndome:

-esperaba que me dijeras eso exactamente

Los parceros se fueron y quedamos de encontrarnos en uno de los amanecederos, yo me apresure a cuadrar la caja, deje al día todas las cuentas, cerramos y nos fuimos al parqueadero.

En el parqueadero casi nos lo comemos, de no ser por don joaquito que paso por un lado y tocio dándonos a entender que respetáramos su negocio, ya en el carro le dije que me daba pereza ir al amanecedero.

-y donde me quieres llevar entonces? Me dijo mientras metía la mano en su blusita acariciaba su pezón.

+no te preocupes, para donde vamos la pasaremos delicioso.

Rápidamente hice un mapa de opciones de moteles en mi mente y cerca de donde estábamos había dos, así que teniendo en cuenta que ya casi eran las 5 de la mañana me apresuré.

Entramos a la habitación y tan pronto cerramos la puerta, un volcán de pasión estallo entre los dos, Jenny se subió encima mío apretándome por la cintura con las piernas, besándome de manera descontrolada, el jadeo de nuestro aliento aumentaba l pasión, mientras nuestras lenguas se entrelazaban, paso a paso fui llevándola hasta la cama donde nos tumbamos, quedando ella debajo, me quito la camiseta y empezó a besarme el pecho mientras buscaba la correa de mi jean para desabrocharlo, con una extraña llave al estilo lucha libre Jenny me dio la vuelta en la cama y ahora yo estaba abajo mientras ella se acaballaba en mi pelvis, lentamente fue quitando su blusa y quito su brasier de donde brotaron sus senos blancos de pezones perfectos y pitón puntudo, se acercó lentamente llevándolos hacia mi cara mientras la escuchaba decir:

-muérdelos, muérdelos, muérdelos, con una voz de pasión y deseo que me hipnotizaba

Los mordí y con las dos manos los unía para tratar de meterlos ambos a la boca, Jenny se levantó de la cama, me dejo tendido y me dijo:

-quiero que disfrutes esto

Coloco música en el equipo de sonido, se dirigió a la barra de pole dance y empezó hacerme tremendo show de streep tease, desabrocho lentamente su jean descaderado, dejando ver su diminuto hilo de color negro, bajo el pantalón lentamente estando de espalda, para dejarme ver sus nalgas, el hilo marcaba perfectamente sus curvas y cuando se agachaba al ceder la tanga se asomaba tímidamente su cuquita depilada.

No aguante más, me levante de la cama y fui hasta donde ella, donde nuevamente se subió encima mío apretándome con sus piernas, me encantaba sentirla así, mientras la besaba l lleve hasta la silla de poses donde la acomode de tal manera que ella quedo arqueada de espaldas y yo sentado frente a sus nalgas y cuquita para darle lengua, sabia delicioso, se mojó muy rápido y empezó a gemir, de los gemidos paso a los gritos, y con cada grito más lengua le daba:

-si así, dame así, chúpamela, chúpamela

-es toda tuya, cómetela toda!!!

De la silla pasamos a la cama donde el sexo fue aún mejor, me pedía que se lo metiera hasta el fondo que no se lo sacara, que le diera duro, que ella era mi perra, que podía hacer con ella lo que quisiera, culiamos de todas las formas que conocíamos, le lamí todo su cuerpo, no quedo un solo centímetro por donde no le hubiese pasado la lengua, ella por su parte me compensaba tomado fotos con sus celular, grabando videos de las poses que la mataban, ese día culiamos toda la mañana, salimos casi a las 11 de la mañana, y nos fuimos no por falta de ganas sino porque la plata no alcanzaba para estar 4 horas más.

La lleve a su casa y al bajarse del carro me dijo:

-no sé tú, pero yo quiero volver a repetirlo más seguido.

+es complicado, tu sabes que tengo novia, le conteste.

-y quien te dijo que yo me quiero acostar con ella? No me interesa si tienes novia, si eres casado, si vas a hacer curso para cura, solo quiero hacerlo más seguido contigo. Piénsalo.

Me beso, se bajó del carro, y antes de retirarse de la ventanilla finalizo la conversación diciendo:

-Andrés, no lo pienses tanto, seamos amigos especiales. Bye.