Sarita, entre ángeles y demonios
- Por Kandu
- 29 abr 2016
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 18 dic 2024

Esa noche decidí salir de rumba con una de mis amigas, la idea era ir a divertirnos las dos solas, el plan era una noche de niñas, así que decidimos ir a la 93 y no nos tomamos la molestia de decidir a cuál bar entrar, solo entramos al primero que vimos.
Nos hicimos en la barra y no demoraron en empezar a echarnos los perros los hombres que estaban ahí, pero no le hacíamos caso a ninguno de los coquetos del lugar, mientras disfrutábamos del coctel hablábamos de los tipos lindos que había en el sitio, la noche siguió y nosotras bailábamos solas, reíamos mucho, la estábamos pasando delicioso, supongo que a más de uno le debimos parecer un par de lesbianas por la forma en que nos divertíamos.
A las 11 de la noche al bar no le cabía una persona más, la barra estaba llena, de un momento a otro me di cuenta que se hicieron dos tipos súper lindos, parecían modelos, un cuerpo estupendo, la cara hermosa, la forma en que vestían y lo rico que olían. Hablaban entre ellos y note que uno no me quitaba la vista de encima, mi amiga también lo noto y me dijo:
-te diste cuenta que uno de esos niños no deja de verte?
-sí, están divinos, no crees?
Entre canción y canción terminamos bailando los cuatro, yo me sentía muy bien con ellos, pero note que cada cierto tiempo decían entre ellos:
-esa es, esa es, esa es!
Al principio lo tome de manera divertida porque pensaba que lo decían por la manera en que bailaba con ellos, en medio de la conversación me di cuenta que uno era caleño y el otro costeño, habían sido compañeros de universidad y ahora compartían un apartamento, les pregunte si eran familiares por la forma tan particular en que se trataban, pero cada vez que les preguntaba algo me decían:
-esa es, esa es, esa es!
Continuamos la rumba y la verdad me sentía como una diva en medio de ese par de ángeles, de hecho, causaba la envidia de las demás niñas del bar, y lo notaba por la mirada que algunas me hacían.
La noche continuo como cualquier otra hasta que a mi amiga la llamo el novio y le dijo que iba a pasar por ella para que se fueran para una fiesta en chia, mi amiga me dijo que si quería ir le dije que los invitáramos, ellos agradecieron la invitación, pero la verdad no les llamaba la atención que más bien si yo quería me quedara con ellos. No le vi problema y le dije a mi amiga que me quedaba, me pregunto si estaba segura y le dije:
-no te preocupes no va pasar nada, voy a estar bien, no te preocupes que se me cuidar sola.
Ya estando en confianza les volví a preguntar si eran parientes, primos tal vez, solo se reían y decían entre ellos cuéntale tú, no, hazlo tú. Por la forma de actuar y por cómo se empezaron a tratar con bastante suavidad me di cuenta que eran pareja, pero no estaba del todo convencida así que fui directa:
-son pareja?
Se carcajearon los dos y el caleño me respondió:
-lo parecemos?
-la verdad ya no se ni que pensar.
-si, lo somos, te sientes desconcertada?
Me quede mirándolos y mentalmente si me sentía desconcertada, pero le conteste:
-no, para nada, lo note desde el principio, no se preocupen es lo más normal.
Continuamos la rumba y el que fueran gays al principio me bajo la nota, pero luego de un rato ellos se encargaron de volver a subírmela, no se comportaban como gays, de hecho, no se tocaban entre ellos ni nada por el estilo.
Ellos se sentaron en las sillas de la barra y yo quede de pie frente a ellos, empezaron a contarme su historia y al terminar me dijeron:
-qué opinas?
Me quedé viéndolos fijamente y le di en un beso en la boca a cada uno, a lo que nuevamente dijeron:
-esa es, esa esa!
-bueno, ahora si me van a decir porque toda la noche me han dicho así y no quiero que me salgan con cuentos.
-te decimos así porque desde que te vinos en la barra nos pareciste hermosa y queremos proponerte algo. Nosotros somos pareja, vivimos juntos pero queremos hacer un trio con una niña linda como tú.
Lo pese dos minutos mientras los veía y ellos solo me miraban esperando que les dijera algo. Así que nuevamente besé a cada uno en la boca y les dije:
-listo, hagámoslo!
Se voltearon a ver y se besaron entre ellos, lo que hizo que llamáramos más la atención en el sitio. Hablamos sobre el precio del servicio y no pusieron ningún tipo de objeción por el precio, estuvieron de acuerdo. Terminamos los cocteles y me propusieron seguirla en el apartamento de ellos.
Vivian en un apartamento divino, el ascensor llegaba a la sala, todo era muy lujoso y de buen gusto, me invitaron a seguir, desataron una botella de Nuvo, brindamos por habernos conocido, pusieron algo de música y empezamos a bailar los tres, me besaba con los dos pero el que me daba los besos más ricos era el costeño, me besaba con más pasión, encendieron la chimenea y se quitaron la camisa, este par de ángeles tenían unos cuerpos perfectos, me pidieron que m pusiera mas cómoda, así que entre trago y trago de Nuvo en ambiente se puso más hot y me fui despojando de mi ropa.
Seguimos bebiendo, bailando y besándonos, ellos ya estaban en bóxer y yo solo tenía la falda puesta, me besaban los senos de una manera deliciosa, así que cuando y estuvimos muy calientes nos desnudamos y empezamos a tener sexo los tres, nos basamos mucho, verlos besarse me daba mucho morbo, manos por todos lados, caricias, entre ellos se hacían oral, pero yo notaba que el mas apasionado conmigo era el costeño, en la forma que me tocaba, en un momento hubo un receso así que aproveche para ir al baño y mientras caminaba me reía, me sentía súper feliz, me miraba en el espejo y me sentía muy bien con ellos.

Mientras me arreglaba en el baño, empecé a escuchar susurros como el sonido de palmadas, lo primero que se me vino a la cabeza era que ya habían empezado sin mí, la verdad me daba algo de morbo salir y encontrarlos teniendo sexo, así que me apresure a desnudarme, me perfume y solo me deje el collar de perlas, pero no habían empezado sin mi, la verdad era algo mucho más grave.
Cual sería mi desconcierto al llegar a la sala, que no los encontré teniendo sexo, sino que estaban discutiendo y el caleño le estaba dando cachetadas muy fuertes al costeño, le estaba haciendo el reclamo de por qué me había besado de esa manera y que cual era el tema con mis senos.
Por un momento pensé que se trataba de un juego entre ellos, así que solo atine a decirles:
-calma chicos, no peleen que esta noche soy para los dos.
El caleño me contesto:
-cállate perra que esto no es contigo.
El costeño le contesto:
-no la trates así, respétala!
En ese momento se empezaron a pegar más duro, se les salió lo malos que eran, ya los ángeles que conocí en el bar no eran ni la sombra, ahora eran un par de demonio que peleaban entre ellos, al punto que cayeron sobre la alfombra y se daban puños, yo no podía creer lo que estaba pasando, se pegaban muy duro, se decían muchas cosas, no sabía cómo separarlos, yo estaba desnuda y con mucho susto por lo que estaba pasando, así que busque mi ropa, me vestí súper rápido, y al darse cuenta dejaron de golpearse y me pidieron que no me fuera
.
La situación era bastante tensa y la verdad ya no quería estar con ellos, sentía temor que el caleño me lastimara, porque entre comillas yo era la culpable de la discusión de ellos. Me fui hacia la puerta y la discusión continuo. El costeño no quería que me fuera y el caleño si, de hecho, decía:
-porque la defiendes, mira que por culpa de ella es que estamos peleando.
El costeño le contesto:
-ella no tiene la culpa, además los dos habíamos acordado que lo íbamos a hacer, que debimos probar cosas diferentes para esta relación.
Yo estaba muy nerviosa y les decía:
-por favor déjenme ir, ya no quiero estar más aquí, yo me voy y ustedes se quedan peleando si quieren o se reconcilian, pero por favor no quiero estar más aquí y si no llamo a la policía.
-no hay necesidad que lo hagas y déjala ir. Contesto el caleño
-pues entonces yo me voy con ella. Contesto el costeño
En ese momento el caleño se enfureció y se puso aún más tensionante el ambiente:
-pero como te vas a ir con una vieja que acabas de conocer, es más importante ella que yo que soy tu marido?
El costeño se vistió, mientras el caleño seguía alegándole, llamo al ascensor con la llave magnética, apenas se abrió la puerta entramos y yo pensaba que el caleño se iba a meter a seguir la pele, pero solo lo insultaba.
Mientras descendía el ascensor, el costeño me pregunto que para donde quería irme
-mira la verdad yo solo quiero irme para mi apartamento
-listo vamonos para alla.
Cuando llegamos al apartamento me dijo que estaba despechado y que quería beber, pedimos licor a domicilio y empezó a beber, me senté en l sala con el a acompañarme y en medio de la borrachera me dijo:
-quiero que mañana nos vayamos para barranquilla, te quiero presentar a mi familia, quiero que te conozcan, tú me gustas mucho y la verdad esta noche me di cuenta que no soy tan marica como pensaba.
Le seguí la corriente mientras el continuaba bebiendo hasta que se quedó dormido en el sofá, lo tape con una cobija y me fui a dormir. Como a los 10 minutos empezó a sonar un celular, timbro muchísimas veces y me levante porque no me dejaba dormir. Cuando llegue a la sala el costeño ya había contestado y puso la llamada en altavoz, era el marido que lo estaba llamando, y en medio del llanto le decía que lo amaba, que lo perdonara, que estaba arrepentido de lo que había hecho, le pregunto que donde estaba y el le dijo que en mi apartamento.
-tuviste sexo con ella?
-no amor, solo me senté a beber hasta que me quedé dormido.
-por qué sigues allá?
-ya te dije que me quede dormido.
-vente para acá, allá no es tu lugar mi vida.
-listo hermoso, ya nos vemos.
Se levantó, tomo su chaqueta, se quedó mirándome y me dijo:
-bye, gracias por todo.
¡Me dio un beso en la mejilla y se fue… yo quede plop! pensando ¿Y aquí que paso?
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